Cuando se emprende y no hay tiempo, un elemento esencial es el plan de mercadotecnia. El cual nos ayudará a evitar la dispersión y desarrollar la ruta estratégica.
Uno de los grandes males que se le presentan al emprendedor es la falta de planeación, la inercia operativa y la dispersión. Pierde enfoque y termina con una dispersión en su concepto, ganancias y mercado. Para ello, es importante que desarrolle un plan de mercadotecnia, que ayude a trazar la ruta estratégica. Estos son los elementos o guía rápida para desarrollar un plan de mercadotecnia:
- Antecedentes e información clave. La columna de todo negocio es el ambiente de mercado y entorno competitivo. También, hoy más que nunca existe información pública que se relaciona con nuestra industria y entorno de mercado. Hay que aprovecharla y no guiarnos solo con nuestra visión de mercado. En ocasiones nos llevaremos sorpresas porque estamos enamorados de una idea y la información de mercado nos ayuda a tener expectativas reales y hacer las modificaciones que requiere nuestro concepto y estrategia. También es importante establecer los principios de los indicadores de mercadotecnia que tendremos, para evaluar nuestro desempeño. Aquí entran la razón por la que contratan nuestros productos, insights, hallazgos, indicadores de comportamiento de los consumidores, tamaño de mercado, indicadores de crecimiento de la industria, participación de mercado y tendencias.
- Binomio producto- mercado. Aquí se puntualizan nuestros mercados primarios, secundarios y terciarios. También los elementos que componen cada fórmula de trabajo y variables que tendremos que alinear para cada segmento. El diseño de la fórmula de negocio debe estar alineada a cada segmento, no al revés.
- Declaración de posicionamiento. Primero debemos de desarrollar nuestra base de beneficio que brindamos (o razón por la que el cliente contrata el producto), marco de referencia (categoría), mercado meta (binomios) y razones para creernos (evidencias). Todo esto debe de estar en nuestra declaración o frase de posicionamiento. El problema no es cuando una sola persona la maneja, es cuando son varios los que se encargan de las labores de comercialización y comunicación dentro de una empresa. Se tiene que tener criterios homologados.
- Análisis de competencia. Necesitamos aplicar los mismos elementos base que Michael Porter nos establece en su modelo de competitividad y rivalidad en una industria: cuales son las barreras de entrada, salida, fortalezas y debilidades de cada uno, riesgos y amenazas que representan. Habrá que agregar los competidores potenciales, sustitutos e indicadores de rentabilidad de la industria y los competidores.
- Estrategia de mercado. Para la estrategia debemos de establecer indicadores reales y tangibles. Generalmente serán de crecimiento de participación, de crecimiento de la categoría o industria y de moonto o frecuencia de compra. Después de las metas seguirán las estrategias y tácticas para lograr cada uno de ellos.
- Presupuesto. Desarrolla un presupuesto anual y mensual sobre los planes y tácticas planeadas. Es importante establecer métricas en caso de lograr pasar las metas antes de tiempo, o bien, si no se logran los resultados.
- Métricas e indicadores de mercadotecnia. No se puede administrar lo que no se puede medir. Evaluar qué tan buenas fueron tus acciones con analíticas permite medir el retorno en la inversión y evaluar los resultados. La analítica comprende todas las actividades que emprendas.
Una hoja de ruta genera certeza y marca rumbo. Sirve para comunicar las ideas al resto de la organización. Esta es una gran herramienta para el emprendedor.
Fernando Fuentevilla