Los principales bancos del país tienen como apuesta principal para este año que disminuya el uso de efectivo en el pago del transporte público y se utilice directamente el teléfono móvil o tarjetas bancarias.
El fin es tener para los próximos dos años un promedio de 5 millones de recargas por mes, a través del Metrobús y otras modalidades de transporte en la capital del país y en otras ciudades.
En términos generales, la adopción de la tecnología de pagos sin contacto avanza de forma gradual en el sistema financiero mexicano, con apenas 2% del total de transacciones realizadas bajo esta modalidad; sin embargo, la pandemia de Covid-19 ha acelerado la adopción de esta tendencia global. (El Universal)